In memoriam
Caliche, Corazón Valiente,
la muerte jamás dirá la última palabra
Con
sangre de la recién asesinada los paramilitares escribieron en la pared el
letrero "fuera guerrillo". Esta vez la ejecutada fue Benedicta Joya
Aponte de 75 años, hermana del sacerdote de Carcasí, Santander, quien era
realmente el objetivo. ¿Por qué? El padre Joya es un luchador por los derechos
humanos de sus comunidades, por la paz,defensor del medio ambiente, un
verdadero cristiano cosa que en Colombia genera enemigos muy poderosos, no le
perdonan que estuviera en el mes de diciembre en el Foro Agrario en Bogotá, realizado
por el PNUD y Universidad Nacional y convocado por la Mesa de negociaciones de
paz en la Habana, como parte de la delegación de la Coalición de Movimientos y
organizaciones Sociales de Colombia COMOSOC.
Medio millar de personas desplazadas llegan todos los días, incluido
el tan festejado día de la madre, a muchos mas de la mitad de los municipios
del país[1].
El desplazamiento se produce por bombardeos indiscriminados, ametrallamientos,
acción de nuevos y viejos grupos paramilitares, por combates, por la guerra que
el presidente Santos mantiene y su ministro contrainsurgente anima. El porcentaje
de mayor desplazamiento proviene de aquellos municipios donde el gobierno
desarrolla su Plan Nacional de Consolidación Territorial, plan que comenzó a
desarrollarse a instancias de la “seguridad democrática” de Álvaro Uribe.
Colombia sigue abanderando las cifras de desplazamiento forzoso sumando ya más
de los 6 millones de desplazados.
Ha aumentado en un 29% el número de masacres y la cantidad de
victimas, crecieron los asesinatos selectivos, en particular los de reclamantes
de tierras cuya cifra es de 68 victimas.En
Bogotá cada día desaparece un niño, que seguramente no suman a los 70.000
desaparecidos por razones políticas. En Colombia cada 72 horas es asesinado un
sindicalista.
El presidente Santos ha invertido 22 mil millones de dólares en las
Fuerzas Armadas solo en compra de armamento y sistemas de defensa y se dedica a
la guerra el 25% del presupuesto Nacional. Sin embargo, el 68% de la población
vive en la pobreza o la indigencia, son 8 millones de indigentes y 20 millones
de pobres, el 12% de los niños tiene desnutrición crónica.
Conocido es que Colombia es de los países mas desiguales del mundo y
de los más ricos, donde las vacas viven y comen mejor que la gente por cuenta
de los señores de la tierra, donde hay narcotráfico y lavado de enormes
cantidades de dinero cuyas ganancias quedan en el sector financiero, donde la
corrupción de las elites económicas y políticas solo es comparable con la de la
justicia.
Colombia es uno de los países mas atrasados del mundo, jamás ha sido
una Nación, ni su economía, ni su política, ni su sociedad han logrado un
desarrollo premoderno capitalista. El
país es un “hueco negro” en el contexto de la América Latina de hoy.
En medio de este desolador panorama el gobierno Santos, siguiendo el
aforismo de Maquiavelode “gobernar es hacer creer”, quiere hacer creer a la
opinión nacional y sobre todo a la opinión internacional que se la está jugando
por la negociación y la paz.CREER, ¡esa es la clave de la paz! Y Santos es
consecuente: el único gasto que se ha hecho como propaganda en televisión es
que salen varias personalidades a declarar que CREEN en la paz. Si creemos devotamente,
un día la paz nos va a caer del cielo.
“El desarrollo agrario: el Gobierno piensa que sin una transformación
profunda del sector rural que rompa el círculo vicioso de violencia en el campo
–que causa pobreza, que alimenta más violencia– y cree un círculo virtuoso de
bienestar y estabilidad, no estaremos garantizando la no repetición del
conflicto”[2].
Pero al mismo tiempo y con más vehemencia dice que no habrá cambios en el
modelo económico.
“La participación política: todos los procesos de paz exitosos en el
mundo llevan a una transformación de los grupos armados en movimientos
políticos, eso es precisamente la transformación de un conflicto. Y la base de
esa transformación son las garantías. Garantías para los grupos: que puedan
participar en igualdad de condiciones y sin riesgos de seguridad; y garantías
para la sociedad: que se rompa para siempre el lazo entre la política y las
armas”[3].
¿Garantías con miles de paramilitares, con las FF.AA más poderosas del
continente y regidas por la teoría del enemigo interno? ¿Garantías sin estatuto
de oposición, con un sistema electoral obsoleto, sin medios de comunicación?
¿Garantías con la mafia financiando campañas electorales de la derecha?
“… el
nombre de este problema es ‘conflicto armado interno’. Valga decir: conflicto
con las Farc y con el Eln, y con nadie más”[4].
¿Por eso mataron a un millón de colombianos? ¿Por qué entonces el Estado ha
sido condenado en múltiples ocasiones en tribunales internacionalespor
genocidio y crímenes de lesa humanidad?¿De dónde salieron los guerrilleros de
las FARC, del ELN, y después los del M-19, EPL, Quintín Lame, PRT, y mucho
antes, de dónde salió Guadalupe Salcedo y sus 50.000 guerrilleros?
¿Por qué esperar al acuerdo final para que el gobierna cumpla con su
deber constitucional de proteger la vida, honra y bienes de los ciudadanos, de
garantizar la participación y la democracia, el derecho al trabajo, a la
educación, a la salud y todos los derechos económicos y sociales? ¿Por qué
EE.UU apoya la negociación y el proceso de paz en Colombia mientras desatan
guerras por doquier?
¿La política de paz de Santos es un chantaje?O se desmovilizan o se
mueren!, Se desmovilizan o tendrán otra vez a Uribe!, la impunidad para el
estado y el peso de la “ley” para la insurgencia!, Impunidad para el estado
terrorista y extradición para los luchadores!, firman un acuerdo ya y sin
condiciones o se les acabó el tiempo!. El chantaje del terror es la política de paz
de Santos;su política no es ambigua: por el contrario, es clara, perversa y muy
peligrosa.
Santos tiene la tarea de desmovilizar a la insurgencia colombiana a
cambio de un discurso, sin cambios estructurales ni en lo político, ni en lo
económico, ni en lo social y en consecuencia sin un amplio movimiento popular,
soberano y patriótico, capaz de llegar al poder en unas elecciones. Es la razón
para oponerse a un cese al fuego inmediato y a una Asamblea Nacional
Constituyente. Sin guerrilla combatiente y sin resistencia del pueblo,quéfácil
será abrirle la puerta a una intervención militar de EE.UU a Suramérica.
Cada campesino, cada trabajador, cada intelectual, cada estudiante, cada
hombre, cada joven, cada mujer, todos ellas y ellos los indios, los blancos,
los negros, los poetas, los músicos, los artistas, los sacerdotes y pastores
del pueblo, de todas las religiones y los partidos, de todas las creencias y
oficios, todos y todas debemos unirnos para imponer la paz con profundas
reformas, justicia social, soberanía y garantía de no repetición.